El buque «Tlemcen», que debió refugiarse hace algunas semanas en
Formentor a consecuencia de un corrimiento de carga por el temporal
que azotaba esos días el mar balear, se encuentra ya en el Dique
del Oeste de Palma, aunque continúa con un pronunciado
escoramiento.
El barco llegó a la bahía de Palma el pasado domingo, remolcado
por una embarcación llegado expresamente desde Tarragona, y ayer
los operarios iniciaron los trabajos encaminados a corregir el
desnivel del buque. Una grúa de grandes dimensiones movió los
contenedores que almacenan vacas muertas, y cambió su posición,
presumiblemente para equilibrar el «Tlemcen».
El hedor de los animales fallecidos, a pesar de que están
cubiertos en cal, era claramente perceptible desde tierra. Las
autoridades portuarias, sin embargo, aseguraron que no había riesgo
de infección o epidemia. A este respecto, y según algunas fuentes
consultadas por este periódico, en la noche del domingo técnicos de
Sanitat intentaron subir al buque, pero la tripulación les vetó la
entrada por motivos desconocidos.
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