Una mula que paseaba tranquilamente por las calles de La Bonanova,
en Palma, fue interceptada en la medianoche del domingo al lunes
por una patrulla de la Policía Local, que temía que el animal
provocara un accidente de tráfico.
Sobre las 00.35 horas una brigada de EMAYA se puso en contacto
con el 092 para denunciar que «dos caballos» deambulaban por la
calzada de la calle Francisco Vidal Sureda. La policía dio una
batida por las inmediaciones y en la calle José Sampol detectó a
una mula de color gris, que ocupaba la vía y representaba un serio
riesgo para la circulación.
Los funcionarios tomaron una cuerda y retuvieron al animal.
Continuaron la inspección por La Bonanova y al final de la calle
Peñíscola descubrieron una verja parcialmente derribada y a pocos
metros un burro de color marrón. Los agentes procedieron a
trasladar a la mula junto a su «compañero» y enderezaron la barrera
de modo que no pudieran volver a escaparse.
La intervención policial, empero, no finalizó aquí. Los
actuantes del 092 iniciaron las gestiones pertinentes para
localizar al dueño de los animales, ponerle al corriente de lo
ocurrido y, sobre todo, pedirle que en el futuro tuviera más esmero
en su cuidado.
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