El preso de Girona en libertad condicional que pidió volver a la
cárcel, Juan Peinado Calero, dijo estar dispuesto a agredir a un
juez para conseguir su encarcelación, la única medida que, a su
juicio, podría evitar que volviese a delinquir.
Peinado Calero obtuvo la libertad condicional al pedir la
sustitución de la pena de treinta meses de cárcel a la que fue
condenado por un tratamiento de desintoxicación. No obstante, el
recluso indicó que su situación personal, estaba sin dinero, le
obligaría a volver a delinquir.
El recluso declaró el miércoles en un juicio contra él. Pidió
entrevistarse con el juez y le comunicó que quería volver a la
cárcel. El magistrado aceptó su propuesta, considerando que era la
más insólita de toda su carrera profesional. El recluso se
encuentra ahora en prisión.
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