TW
0
EFE-EEUU Los seis presos que se habían fugado de la prisión de máxima seguridad de Riverbend, en Tennessee, fueron capturados, el último de ellos después de que un amigo lo delatara a cambio de una importante recompensa.

Los presos, tres de los cuales cumplían condenas por asesinato, se escaparon el pasado domingo, cuando a dos de ellos, Billy Jackson Coffelt, de 44 años, y Lyle Thomas van Ulzen, de 33, se les permitió que salieran de sus celdas para distribuir la comida a los reclusos musulmanes durante el Ramadán.

Van Ulzen cumplía una condena por asesinato e incendio intencionado, y Coffelt había sido sentenciado a cadena perpetua como «criminal consuetudinario». Con cuchillos improvisados, los presos dominaron a dos guardias desarmados, les quitaron las radios y chaquetas, y los encadenaron a las sillas con esposas y grilletes. Ninguno de los guardias resultó herido.

Los presos usaron una escalera y dos colchones para pasar por encima de la valla con alambre de púas del penal, de 4 metros de altura. Aharon Tyron James, de 24 años, quien cumplía una sentencia de 50 años de prisión por asesinato, secuestro y robo a mano armada, fue capturado en el sótano de una casa en el oeste de Nashville.