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Los servicios beneméritos, en Balears y fuera del archipiélago, no se limitan a la incautación de drogas o a la desarticulación de organizaciones mafiosas. El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) realiza en las islas una labor «silenciosa» pero igualmente significativa, de gran valor ecológico.

En la estadística de esta unidad facilitada ayer por la 313 Comandancia, se especifica que durante los doce meses del año que acaba se procedió a la recuperación de 140 especies protegidas por la legislación C.I.T.E.S. y que se hallan en serio peligro de extinción.

Según la OPC (Oficina Periférica de Comunicación), entre esas especies intervenidas se hallan aves rapaces como halcones peregrinos, cernícalos, lechuzas y otros especímenes del tipo de la tortuga mediterránea, corales y diversas aves tropicales.

Además de esta ingente labor, el Seprona ha cursado a lo largo del año que finaliza un total de 1.325 denuncias por infracciones en diferentes conceptos: incendios forestales causados por negligencias o provocados de forma intencionada, contaminación de aguas marítimas o continentales, cazar durante época de veda o en zonas no permitidas, vertido de residuos sólidos y urbanos, etc...