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Dicen que lo que no se publica es como si no hubiera existido. Eso es lo que debe pensar el alcalde de Palma, José Hila, respecto a su director de comunicación y la petición de cárcel a la que se enfrenta. Nada menos que 17 años de cárcel pide la Fiscalía en el juicio contra Josep Alcover, uno de los implicados en el ‘caso Multimedia’, un escándalo que surgió en la última legislatura de Antich y por la que se solicitan nada menos que 142 años de cárcel para el total de los acusados. De los implicados solo uno tiene cargo público, al menos que se sepa: se trata de Josep Alcover, que en su cargo de director de Comunicación debe ser la persona encargada de repartir la publicidad entre medios de comunicación de Palma. El presupuesto que gestiona debe ser realmente importante, pero lo preocupante no es el dinero que gestiona sino que siga en su cargo cuando está realmente bajo sospecha. La Fiscalía cree que Alcover cometió cuatro delitos cuando trabajaba en la empresa Multimedia.

Alcover asumió el cargo en junio de 2019 y el escrito de acusación de la Fiscalía se entregó en diciembre de 2020. Imagino que desde entonces el alcalde debía estar al corriente de la situación de Alcover, pero lejos de destituirlo y pedir su suspensión de militancia del PSOE, como dice el código ético que puede leerse en la web socialista, ahí sigue el director de Comunicación a la espera del juicio, que ya será después de las elecciones, si bien parece que se le hizo un traje a medida para que ocupe un cargo de por vida en la EMT. Y tiene mérito porque en su currículum se puede comprobar que no acabó ni siquiera el Bachillerato.

Esta protección resulta escandalosa para un partido que se erige en modelo de transparencia, pero peor es la situación de Podemos, que de denunciar todo tipo de corrupción, incluso la que no se ha demostrado, han callado con este asunto. ¿Qué piensa el otrora combativo Alberto Jarabo sobre que la Fiscalía pida 17 años de cárcel para un alto cargo del PSOE? ¿Lo sabía Sonia Vivas, la otra gran defensora de la transparencia hasta que ella misma se vio envuelta en un asunto bastante turbio? ¿Se sentirán cómodos los dirigentes de Podemos una vez que se haya conocido este asunto, silenciado durante más de dos años de forma realmente milagrosa? A la hora de pedir explicaciones a otros dirigentes políticos, Hila debería salir el primero y confirmar si sabía lo de su director de Comunicación, y si lo sabía el motivo por el cual ha mantenido a Alcover en un cargo público durante dos años. Pero me temo que nadie dirá nada. Y todo seguirá igual, pero debería servir para reflexionar sobre el compadreo que ha existido durante estos años en esta tierra.