Una de las lecciones del golpe abrupto del coronavirus debiera ser repensar los modelos de crecimiento. Ello constituye un desafío para las ciencias sociales y para la política y las finanzas porque supone un reto fundamental: abandonar zonas de confort. Es decir: optar, decidir, errar, enmendar, fracasar, rehacer, transformar y persuadir. Esta crisis demuestra que son primordiales las apuestas estratégicas para sectores relacionados con la economía del conocimiento y la economía de los servicios públicos, especialmente los sanitarios y los sociales. Aquellas regiones que, en un contexto difícil como el de la Gran Recesión, mantuvieron infraestructuras y personal sanitario, han podido afrontar el coronavirus con más solvencia que otras economías regionales donde sus gobernantes decidieron aplicar una política de recortes presupuestarios generalizados, con poca o nula discriminación hacia los servicios de la salud pública. En el ejemplo de España, los casos de Madrid y Cataluña son ilustrativos.
Socialismo participativo
Palma01/08/21 1:05
También en Opinión
- Una anciana sufre un ictus tras ser agredida por una joven en Son Cladera
- El drama de la vivienda en la Isla, a un paso del estallido social por su precio
- Un fallo en el sistema de seguridad deja encerrados a media docena de presos en un furgón de la Policía Nacional
- «Nadie quiere venir a trabajar a Baleares por el alto nivel de vida»
- «Era inocente, pero tuve que dimitir de jefe de Policía para proteger a mi familia»
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.