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Hace exactamente una semana se viralizó en redes sociales un vídeo corto en el que se podía ver como un supuesto gorila se cruzaba en el camino de un grupo de senderistas en el Gorg Blau. Es un clip que junto a la exclamación «Quin bolarro!» corrió como la pólvora por toda Mallorca y que fue compartido por miles de personas tanto en Instagram como en TikTok.

Las imágenes recibieron todo tipo de reacciones, aunque lo cierto es que prácticamente ningún usuario se creía que de verdad hubiese un primate vagando por la Serra de Tramuntana. Entre los comentarios se podían leer algunos con un toque de humor como «Eso es un gorila que se le escapó hace años a un turista», pero también había acusaciones del tipo «Todo vale por un like».

Aunque en un principio se desconocía quién estaba detrás del vídeo viral, días después y ante la gran expectación fueron los propios autores los que dieron la cara. «Fue un reels hecho con toda la intención, para promocionar nuestra empresa. Lograrlo era más difícil», comentan los hermanos Sergi y Xiscu Martí, que con esta publicación querían dar a conocer su marca de productos cosméticos y cremas deportivas cuyo logo precisamente es un gorila.

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La idea de crear al reels fue de Marc Llompart, entrenador personal y encargado del márketing de la pequeña empresa de estos emprendedores de Sóller. «Todo surgió a raíz de un post de una multinacional de Estados Unidos que realizó una exitosa estrategia de márketing. Nos inspiramos en ellos, aunque en su caso utilizaron miles de dólares y nosotros tan solo 500 euros, que fue lo que costó el disfraz de gorila que compramos en América», señala Marc.

En poco más de media hora, los hermanos Martí y Marc, junto a sus amigos Jaume ‘perrote’, Joan Sastre, Andrés Morey, Hugo Fulk y Josep ‘medusa’, quienes hicieron de excursionistas, grabaron el vídeo. «Fue rápido. Teníamos claro que la ubicación tenía que ser el Gorg Blau y repetimos la secuencia tan sólo tres veces», explican los autores a este periódico.

Y es que lo tenían todo muy estudiado, hasta quién de ellos debía ser el que subiese el vídeo a las redes: «A diferencia de lo puede imaginar la gente, buscamos al que tenía menos seguidores en su Instagram». Y ese fue Andrés Morey, quien con tan solo 447 seguidores ya supera las 87 mil visualizaciones.

Lo que más destacan los jóvenes es que «todo tenía que suceder de la manera más natural, como algo improvisado, nada preparado y con un guion (aunque lo tenía) y creo que lo conseguimos». Es un trabajo de márketing que les ha dado buenos resultados, tal y como demuestra la repercusión mediático que ha tenido, y aseguran que tienen más ideas: «Ya estamos preparando otro vídeo, en la misma línea». En definitiva, que un gorila anda suelto por Mallorca.