La artista catalana Dàmaris Gelabert cantó con The Grow Up Singing Band.

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Quién dijo que no se puede disfrutar de un festival de música en familia. El Parc Municipal Sa Torre, en Felanitx, acogió ayer la primera edición de TribuFest, un festival nacido con la vocación de ofrecer un entretenimiento de calidad para toda la familia, que los niños vivan sus primeras experiencias musicales y puedan socializar en un ambiente lúdico y divulgativo, y que potencie toda su creatividad. Con un cielo encapotado -algo que agradeció la piel de los más pequeños-, el festival arrancó alrededor de las 11 horas, y se extendió hasta la noche.

Música, espectáculos y juego, mucho juego, fueron protagonistas en una día donde no solo disfrutaron los niños, sino también padres y abuelos quienes, de algún modo, volvieron a su infancia. El pasacalles de la banda local de swing Monkey Doo, que más tarde ofrecieron un concierto, y la música de Bruixa Ma-Maduixa dieron el sus a un formato de festival bien asentado en Catalunya y con un público en crecimiento exponencial. A las 12.15 horas llegó la hora de Centimets & Family Band, un divertido grupo que propuso un concierto donde mezclaron la magia del teatro con la música. A las 14 horas, los Monkey Doo subieron al escenario y amenizaron la hora de la comida. El público pudo escoger entre las elaboraciones del restaurante del parque o entre un amplio abanico de foodtrucks.

Pero como ya se ha mencionado, el TribuFest no se redujo a los conciertos familiares. Durante toda la jornada, los presentes disfrutaron de una gran cantidad de espectáculos, talleres y actividades infantiles. Por un lado, tuvieron la oportunidad de conocer el proyecto de ‘Il·lusions Efímeres’ y sus paratges lúdics, instalaciones de juego libre donde el arte y la pedagogía se toman de la mano. Por otro lado, grandes y pequeños participaron en un animado taller de danza africana, impartido por Víctor Uwagba, quien les transmitió su pasión y alegría, y logró quitarle la timidez hasta al niño, o padre, más vergonzoso.

Además de aprovechar las modernas instalaciones del parque y lanzarse en su tirolina o sus toboganes, padres e hijos compartieron un rato agradable con los juegos de Ludoteca de Jardí, que no podía faltar a la cita. Otros que no podían eludir el evento eran los grandes artistas circenses de Circ Bover, que instaló su original carpa a la fresca, por donde pasaron clowns, malabaristas y saltimbanquis como el mallorquín Banton Circus, la Cía. argentina Mar del Circo o el catalán Nando Caneca. Y todos tuvieron mucho éxito, ya que no cabía un alma en la aireada carpa. Por otra parte, el Circ Bover organizó sus talleres Bambucirc, donde pudo ojear a futuras estrellas. Otra de las grandes atracciones fue el 'Ecotiovivo a pedales', que dónde va, triunfa.

Por la tarde el sol hizo acto de presencia y, bien cubiertos de crema solar, con la gorra y las gafas de sol de rigor, los niños disfrutaron de los grandes conciertos del festival. A las 15.45 horas subió al escenario Lali BeGood, destacada artista catalana con una gran variedad de estilos musicales y cuyas letras transmiten valores contemporáneos; a Lali le siguieron Siamiss Djs, un dúo que, tras pasar diez años como residentes en la Sala Razzmatazz de Barcelona, impartieron una pequeña masterclass de la historia de la música a los más pequeños, enseñándoles diferentes géneros y registros. Acto seguido llegó el momento de la gran estrella del festival, la catalana Dàmaris Gelabert, que está celebrando sus 25 años de carrera en una gira de lujo, con la que se despide temporalmente de los escenarios, y acompañada por The Grow Up Singing Band. Para acabar por todo lo alto, TribuFest se clausuró con un concierto de los ganadores de varios premios Enderrock, Xanguito.