La difícil apertura del mundo islámico se ceba sobre las mujeres. Foto: ARCHIVO/EFE.

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EP/AP-GAZA
Las Espadas de la Verdad, un grupo islamista fanático palestino amenazó ayer con decapitar a las presentadoras de televisión que no vistan de acuerdo con una estricta interpretación de la religión musulmana en un nuevo síntoma de radicalización en la Franja de Gaza.

La mayoría de las quince presentadoras de la gubernamental Palestine TV utilizan pañuelo, pero también llevan maquillaje y ropas occidentales, unas costumbres consideradas no tradicionales por los extremistas.

La amenaza de «cortar la garganta vena a vena» supone la primera vez que el grupo, que hasta ahora sólo ha reivindicado la colocación de artefactos explosivos en cibercafés y tiendas de música, identifica a un objetivo de manera explícita.

En muchas partes del mundo musulmán, los conservadores impiden que las mujeres ocupen puestos clave en las cadenas de televisión o les imponen llevar pañuelos durante la emisión para cubrir sus cabezas. Sin embargo, entre las presentadoras de televisión palestinas, libanesas, jordanas o egipcias es muy poco común el uso de pañuelos.

«Cortaremos gargantas vena por vena si es necesario para proteger el espíritu y la moral de esta nación», apunta el comunicado, remitido por correo electrónico a los medios de comunicación. En el texto, Las Espadas de la Verdad, también acusa a las presentadoras de «no tener ninguna vergüenza ni moral».

Por otra parte, en torno a cincuenta empleados de Televisión Palestina, mujeres en su mayoría, marcharon ayer por las calles de Gaza en señal de protesta ante las amenazas de decapitación formuladas por un grupo fundamentalista islámico si las periodistas no empezaban a vestirse de forma más ajustada a la tradición islámica.