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La consellera de Inmigració y Cooperació del Govern balear, Encarnación Pastor, aseguró ayer que tiene el «compromiso firme» por parte del Gobierno de equiparar a los residentes extracomunitarios con los comunitarios en materia de descuentos de transporte aéreo y marítimo.

Tras reunirse con la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, María Consuelo Rumí, a quien le trasladó esta petición, afirmó que tienen la «promesa» de que se va a «contemplar muy seriamente». «Hasta ahora no se contempla ese descuento para los extracomunitarios y es una injusticia que hay que arreglar», indicó.

Asimismo, recordó que el pasado 30 de noviembre realizaron esta petición al delegado del Gobierno en Baleares, y añadió que le consta que ya se ha trasladado «al más alto nivel». «Los ciudadanos residentes lo son sin mirar de donde vienen y donde van, tanto los comunitarios, como los extracomunitarios, como los españoles que viven en las Islas», destacó.

Por otro lado, la titular balear de Inmigració i Cooperació recalcó que también obtuvo de Rumí la promesa de que se va a revisar el hecho de la insularidad y la doble insularidad, como es el caso de Formentera, algo que, por ejemplo, evitaría bastantes problemas a los ciudadanos de las Islas a la hora de realizar gestiones con el Estado. Según dijo, el convenio se revisará el año que viene. Además, afirmó que «ya está bien» de que Balears sea siempre «marginal» en estos casos.

La reunión se produjo a instancias de la consellera, quien puso en conocimiento de la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración las competencias y el trabajo que se viene desarrollando desde la creación de la Conselleria d'Inmigració y Cooperació. Informó sobre los proyectos que se han realizado y los que se van a poner en marcha con los fondos estatales que se han destinado a la comunidad autónoma en materia de integración de las personas inmigrantes en las Islas Baleares y expuso su postura sobre el reparto de dichos fondos a las diferentes comunidades autónomas.

Finalmente, Pastor indicó su deseo de crear un Consulado permanente de Colombia en Balears, algo que tenía previsto trasladarle a la embajadora colombiana en España, Noemí Sanín.