Los granjeros del Reino Unido deberán mantener a sus cerdos felices
con juguetes y paja, si no quieren ser fuertemente multados, dijo
el miércoles el gobierno británico. A los granjeros se les ha dicho
que deben poner pelotas, cadenas de metal o heno en las pocilgas
para «enriquecer el ambiente» de sus animales. La norma,
originalmente de la Comisión Europea y ahora convertida en ley en
Gran Bretaña, está destinada a evitar que los cerdos se aburran y
se ataquen entre ellos.
«Es para permitir a los cerdos husmear con su hocico, una
importante necesidad de comportamiento», dijo un portavoz del
departamento británico para el Medio Ambiente y Asuntos Rurales.
Los granjeros pueden utilizar paja y heno en lugar de juguetes si
sus pocilgas tienen suelo sólido, no de pantano. Cualquiera que
viole las normas se enfrenta a una multa de hasta 2.500 libras
(unos 4.100 dólares), dijo el departamento. Los granjeros, que aún
se están recuperando de la epidemia de fiebre aftosa de 2001 que
llevó al sacrificio de millones de animales, dijeron que era
difícil tomarse en serio la legislación.
La Comisión Europea señaló que las normas europeas sobre
bienestar animal «no obligan a ningún productor a poner pelotas ni
juguetes en las pocilgas para entretener a los cerdos», afirmó la
portavoz de Sanidad, Beate Gminder. Señaló que la CE «no se
responsabiliza» de la transposición que hacen los Estados de la UE
de las normativas comunitarias.
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