La Ley Orgánica de las Cualificaciones y la Formación Profesional
culminó ayer su tramitación parlamentaria al ser aprobada en el
Pleno del Senado, que rechazó todas las propuestas de veto y las
enmiendas parciales, por lo que el texto no debe ser ratificado en
el Congreso y su entrada en vigor será en el próximo curso. El
texto fue aprobado con los votos del PP y de Coalición Canaria (126
a favor frente a 63 en contra).
La ley integra las tres modalidades de FP -reglada, continua y
ocupacional- y acerca la formación al empleo, ajustando las
actuales 139 titulaciones a las existentes en la UE para adecuar
las ofertas de formación con las necesidades del mercado
laboral.
La ministra de Educación, Pilar del Castillo, observó tras la
aprobación del texto que se trata de la primera vez en España que
una ley de carácter orgánico regula la Formación Profesional, y
destacó la importancia de vincular la formación y el empleo.
Del Castillo aseguró que la ley define con claridad la
participación de los agentes sociales y de los tres niveles de la
administración (local, autonómica y central), y justificó que hayan
sido rechazadas todas las enmiendas parciales (227) por ser -dijo-
las mismas que ya habían decaído en el Congreso.
Respecto a la financiación, la ministra destacó la «importante»
dotación que se destina a la FP, que entre fondos comunitarios y
aportaciones de las administraciones suman 660.000 millones de
pesetas, y destacó que hacía falta ordenar el sistema.
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