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Las mujeres rurales fuman un 20% menos que las urbanas, beben más vino en las comidas, comen de forma más sana y son ligeramente más obesas que en las ciudades. Estas son algunas de las características de la mujer rural, a la que va dirigida una campaña que comienza mañana y que organiza la Fundación Española del Corazón en colaboración con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. La campaña, que tiene como lema «Ponle corazón», pretende hacer llegar a la mujer de los pequeños pueblos del campo español los beneficios de una dieta cardiosaludable y que conozca los hábitos de vida que sirven para prevenir las enfermedades del corazón. Durante la primera quincena del mes de junio se celebrarán charlas en pueblos seleccionados por la Federación Nacional de la Mujer Rural, que colabora con la campaña y en cuyas sedes se celebrarán charlas y meriendas saludables. El cardiólogo Juan Carlos Pisaca, del Hospital de Getafe de Madrid, que será uno de los encargados de informar en los pueblos de distintas comunidades autónomas, dijo hoy en rueda de prensa que a través de las mujeres llegarán los hábitos de vida saludables a toda la familia. El objetivo es evitar el sedentarismo de muchas mujeres y que rebajen el consumo de carnes grasas y embutidos en beneficio de las legumbres, los cereales, las frutas y el pescado