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Crear una obra de arte a partir de la destrucción que dejó la borrasca Juliette a su paso hace un año. Este es el objetivo principal del proyecto solidario que ha puesto en marcha el estudio de pintura Estudi Creatiu de Palma de la mano de sus alumnos. Los jóvenes artistas están pintando sobre bases de madera cortadas a partir de los troncos de los miles de árboles que cayeron por la tormenta de viento y nieve en el Santuario de Lluc.

La finalidad de este proyecto es recaudar fondos para la recuperación del Jardí Botànic Germà Macià de Lluc, cuya misión es la conservación y multiplicación de especies botánicas de las Illes Balears en peligro de extinción. Una destrucción acelerada hace justo un año, cuando Juliette causó importantes destrozos en este jardín creado por el religioso que le da nombre.

En el estudio, los niños y niñas han estado pintando sobre las llesques de los árboles las especies botánicas presentes en el jardín de Lluc y con ellas formarán una exposición que abrirá sus puertas el 9 de marzo en el edificio de La Misericòrdia en la Rambla de Palma. La exposición se podrá visitar hasta el 16 de marzo y la recaudación de la venta de sus trabajos artísticos se dedicará a la recuperación del Jardí Botànic, donde desde hace un año trabajan grupos de voluntarios para tratar de revertir los daños que provocó el temporal.

Trabajo en equipo

El proyecto solidario ha implicado no solo a los artistas, que han reproducido con fidelidad las plantas, flores e incluso setas presentes en el Jardí Botànic de Lluc, sino también a los padres, que han hecho una aportación de 10 euros por alumno para obtener los materiales necesarios.

Antonia Oliver y Mireia Canyelles crearon Estudi Creatiu en 1998, un taller de arte plástico en cuya misión pedagógica se incluye un proyecto solidario cada curso escolar. «Todos están muy ilusionados con la exposición y con poder ayudar al Jardí Botànic de Lluc», explica Oliver. Los gestores del Santuari han expresado su agradecimiento.