La ADT derriba una vivienda edificada sin licencia y en suelo rústico en Son Servera

Esta construcción se había edificado dentro de un espacio correspondiente a una finca inferior a 4.000 metros cuadrados de extensión, lo que ratificaba que esas obras eran «ilegalizables» por el heco de haber sido ejecutadas en unas dimensiones «muy inferiores» a las mínimas exigidas para construir una vivienda en suelo rústico, tal y como indicó el organismo.

Ya en el año 2018, la Agencia de Defensa del Territorio de Mallorca ordenó la demolición de esas obras, que también incluían una piscina de una superfície de 30 metros cuadrados, además de una terraza de 120 metros cuadrados. En primera instancia, ese expediente fue recurrido medante la vía contencioso-administrativa, aunque posteriormente se confirmó en sentencia firme. Por ello, la propiedad se ha visto obligada a demoler esas construcciones finalmente.