En el acceso se produce densidad de tráfico. | Michel's

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Los hoteleros de Peguera se ponen en pie de guerra contra el Consell de Mallorca. Tras casi un año de obras en el túnel de Son Vic, pero también en el de Sa Coma, la asociación que preside Toni Mayol ha agotado la paciencia y por ello ha querido hacer pública la denuncia de una situación que definen como «decepcionante».

Desde la entidad advierten de las numerosas quejas que están ya recibiendo a estas alturas los pocos establecimientos abiertos, por parte de una clientela que sufre, en pleno Bulevar de Peguera, todas las incomodidades propias de una bulliciosa calle con tráfico rodado, todo el que se desvía desde la autopista hacia el interior del núcleo urbano.

Los ruidos –subrayan desde la entidad– resultan muy molestos por el sonido que genera el adoquinado, mientras los colapsos de circulación que se producen se vieron agravados ayer por un control de la Guardia Civil que dificultó «más todavía» la fluidez de los vehículos.

«Es insostenible, irresponsable e incalificable lo que se le está haciendo a Peguera», señalaba ayer a este diario el presidente de la Asociación Hotelera de la zona, lamentando que «no estén trabajando las 24 horas en acabar las obras de los túneles para minimizar los problemas que nos están ocasionando». Los empresarios han solicitado una cita con el Conseller de Movilitat, Iván Sevillano y han sido emplazados al próximo martes, lo cual revela «escaso interés».