Los ‘xeremiers’ pusieron la nota musical durante la feria en Son Servera. | M.NADAL

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Ahora que las cifras de contagios por coronavirus bajan y parece que la sociedad está saliendo de la sexta ola, empiezan a celebrarse actos en los diferentes municipios. Las Cases de ca s’Hereu, en Son Servera, acogieron este domingo el tradicional Firó de Flor d’Ametler, que se recupera tras el parón del año pasado y que abre la veda a la celebración de ferias en Mallorca. Esta cita llegó ayer a su XII edición. Aunque se trata de una muestra pequeña, cientos de personas se acercaron hasta el municipio para no perderse la feria, que ofrecía una gran variedad de productos, la mayoría de ellos vinculados con la almendra.

Unos 40 expositores llenaron el recinto y los visitantes podían adquirir productos de cosmética, figuras decorativas hechas con la madera del almendro o licores elaborados a partir de la flor del almendro. A diferencia de otros años y, a causa de la pandemia, estuvo prohibido beber o comer en la feria y la mascarilla fue obligatoria en todo momento.

Aún así, el ambiente festivo estuvo muy presente durante toda la mañana en las Cases de ca s’Hereu y hubo una demostración de ball de bot a cargo de la agrupación folclórica Sa Revetla. También hubo una muestra de herramientas antiguas. El Ajuntament de Son Servera presentó esta feria como un símbolo de reactivación para el municipio.