Imagen del yate varado sobre la orilla de la playa. | Michel's

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Este mes de abril se cumplirá un año desde que varios días de temporal marítimo acabaron en Palmanova (Calvià) con un lujoso yate de 22 metros de eslora sobre la orilla de la playa de Son Maties. Durante todo este tiempo, además de una molestia para los bañistas, el «barco de Chanquete», que es como lo llaman algunos residentes de la zona, ha sido objeto de todo tipo de vandalismo: desde destrozos y grafitis, a su ‘okupación’ por personas que han hecho de la nave una vivienda transitoria. Todo mientras la pasividad de los verdaderos propietarios de la embarcación sumía a esta en el más absoluto abandono y consiguiente deterioro. Una situación que, según las previsiones iniciales, debía haberse zanjado esta semana con su desguace y extracción, pero que el estado de alarma decretado por la pandemia de coronavirus ha suspendido sine die.

A finales de 2019, el Ajuntament de Calvià licitó un proyecto presupuestado en unos 80.000 euros para retirar y desguazar el yate, y hacerlo antes del inicio de la Semana Santa que empieza el próximo jueves. Sin embargo, el parón que ha experimentado la práctica totalidad de los sectores industriales ha frenado y retrasado la operación.

Desde el Consistorio presidido por el alcalde Alfonso Rodríguez Badal (PSOE), reconocen ahora que no existe fecha concreta para la retirada de la embarcación y que los plazos pueden alargarse si, en función de la situación actual (estado de alarma), la empresa se ve afectada por la orden de confinamiento de sus trabajadores o se la añaden problemas para la recepción de los materiales necesarios para ejecutar el proyecto.

Las mismas fuentes municipales añaden que, hasta el inicio del estado de alarma, se habían seguido los plazos previstos en lo tocante al proceso administrativo. Lo último que había trascendido es que la empresa que se encargará de la extracción y desguace de la nave ya había concluido el informe que debe evaluar el propio ayuntamiento y en base al cual Demarcación de Costas debía dar el «no inconveniente», para proceder a su retirada, desballestamiento y gestión de los residuos resultantes.

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La memoria justificativa del proyecto atestigua que el yate quedó varado en la playa de Son Maties el 19 de abril de 2019. «Desde entonces, la embarcación permanece abandonada y varada en la playa, habiendo sido objeto de saqueos, grafitis y roturas», detalla el documento.

Reclamación de costes

Para más inri los propietarios del yate de 22 metros de eslora han mostrado una «pasividad» absoluta respecto a la asunción de su responsabilidad de mover el barco, por lo que el Ajuntament de Calvià ha tendido que arrogársela e iniciar los trámites para la licitación del proyecto de extracción y desguace.

No obstante, desde la Administración local calvianera, dejan bien claro que a los titulares de la nave su irresponsabilidad no les saldrá gratis; ya que el Consistorio, una vez ejecutado el proyecto de retirada, desarme y eliminación de residuos, reclamará por todas las vías que sean necesarias el abono de todos los costes al erario municipal.