Sineu tuvo una gran relevancia en la sociedad mallorquina en la época medieval, cuando la realeza de la corona de Aragón fijó en este municipio del Pla una de sus residencias. Las calles estrechas y la tipología de las casas del centro conservan vestigios de valor patrimonial. | Lola Olmo

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Sineu quiere preservar el carácter de su casco antiguo, declarado Bien de Interés Cultural en el año 2010. Cualquier obra que se quiera realizar en sus edificios requiere un informe favorable de Patrimonio, por lo cual los trámites se prolongan durante largos meses hasta que el Ajuntament puede aprobar o denegar una licencia de obras.

El Ajuntament de Sineu ha redactado un Plan Especial del Centro Histórico que recoge medidas de protección como la prohibición de edificar hoteles de nueva planta que no respeten la tipología y la estética de su entramado de calles estrechas, casas de piedra, caserones imponentes con altos portales y abundantes contrafuertes que revelan la importancia que tuvo este municipio en la época medieval.

En la zona declarada BIC, que es prácticamente todo el casco antiguo, solo se podrán abrir hoteles de interior mediante la reconversión de alguno de los edificios ya existentes preservando sus valores patrimoniales. No se podrán construir edificios nuevos en el casco antiguo con materiales contemporáneos, como metal, cristal o aluminio.

Agilizar las licencias

Puesto que la protección del patrimonio ya está garantizada con la declaración como BIC del conjunto, la finalidad del Plan Especial del Centro Histórico es que el Ajuntament de Sineu pueda conceder las licencias de obras en menos tiempo. «Actualmente se necesita un informe de Patrimonio y cuando un vecino del centro pide una licencia de obras, los trámites duran muchos meses; una vez que tengamos este plan, el propio arquitecto municipal podrá decidir si la licencia se ajusta a la normativa», señala Miquel Gelabert, alcalde de Sineu.

Esta normativa que indica qué elementos se han de respetar en las obras que se realicen, las alturas, colores y materiales, entre otros aspectos, ha sido encargado a la empresa GAAT, especializada en planeamiento urbanístico. Tras la publicación en el BOIB ha ce dos meses de la fase de avance para que los ciudadanos pudieran hacer alegaciones, a finales de febrero se publicó la aprobación inicial y pasará de nuevo a exposición pública.

Se calcula que la tramitación de un plan de estas características necesita unos cuatro años para completarse hasta su aprobación definitiva para que pueda entrar en vigor. El de Sineu se inició en 2017 y podría estar operativo en 2021, una vez se hayan resuelto las alegaciones que se puedan presentar y el Consell de Mallorca haya dado el visto bueno.

Cabe recordar que el Ajuntament de Sineu fue uno de los perjudicados por las exigencias de Patrimonio en la zona BIC hace unos años, cuando quiso instalar aire acondicionado en el edificio consistorial, que también está protegido.