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Amics de la Terra ha presentado alegaciones en la Comisión Balear de Medio Ambiente contra el «macro parque» fotovoltaico que se pretende instalar en el municipio de Llucmajor y que ocupará alrededor de 100 hectáreas porque considera supondrá un impacto paisajístico negativo.

La organización ecologista explica en una nota de prensa que se trata de «una zona agrícola de relevancia medioambiental, de una gran belleza, rica en biodiversidad y emblemática para el turismo local y visitante».

Explica que el lugar en el que se pretende construir el parque está rodeado de zona boscosa de alto valor ambiental, declaradas área natural de especial interés (ANEI), lugares de importancia comunitaria (LIC) y zona de especial protección para las aves (ZEPA). como parte de la Red Natura 2000.

Amics de la Terra considera que se debe esperar la aprobación de la modificación del plan director de energía de Baleares antes de autorizar nuevas infraestructuras de renovables «de tal envergadura».

Además, la organización solicita a la Comisión Balear de Medio Ambiente que desestime el proyecto de Llucmajor, que podría incumplir la ley agraria y la de impacto ambiental.

Añade que la planta de Llucmajor promovería un modelo energético «basado en la centralización de la producción y precisando de grandes e impactantes infraestructuras de transformación y transporte de la energía».

Sus beneficios económicos, incide, quedarían en pocas manos y de inversores de fuera de las islas.

Amics de la Terra recuerda su apuesta por «descentralizar y democratizar la producción energética en lo posible», ya que considera que las renovables pueden ayudar a cambiar «el paradigma energético actual, donde la energía está controlada por media docena de empresas».