Pastor tiene claro que no optará a la reelección como alcalde del municipio tras tres mandatos. | M. Joy

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Antoni Pastor no se presentará a la reelección como alcalde de Manacor como candidato de Proposta per les Illes (PI), cargo que habrá ocupado durante tres mandatos. Así lo ha comunicado ya a su círculo más cercano con el argumento de la necesidad de dar por concluida su etapa política a nivel municipal y facilitar la renovación.

Tras descartar competir por la Alcaldía, Pastor está estudiando la posibilidad de participar en las candidaturas al Parlament o al Consell de la formación regionalista que preside Jaume Font junto a Josep Melià y él mismo.

De hecho, el pasado jueves se presentó el comité local del PI en Manacor y el alcalde solo forma parte de él como vocal, ya que la presidencia la ostenta Bel Febrer, persona de su confianza, con la vicepresidencia de Xisco Mateu y en la secretaría, Joan Sagrera.

Su última función habrá sido facilitar la unión de sus regidores de Coalició per Manacor (CpM), a excepción de Maria Bover, con los miembros de Alternativa Liberal per Manacor (ALM) y los de la Lliga Regionalista para formalizar así el PI de Manacor.

Hay que recordar que Pastor (Manacor, 1963) se inició en política en 1995 de la mano del Partido Popular (PP), siendo elegido regidor, cargo que repitió en 1999 y que compaginó con el acta de diputado del Parlament de les Illes Balears hasta el momento.

En las elecciones municipales de 2003 encabezó la candidatura del PP, siendo elegido alcalde gracias a un pacto con la Agrupació Independent de Porto Cristo (AIPC), acuerdo que mantuvo también en el mandato 2003-2007. En 2007 fue nombrado vicepresidente del PP.

Convulsión

Las malas relaciones con el president del Govern, José Ramón Bauzá, y su oposición a las medidas tomadas por su Ejecutivo contra la lengua catalana acabaron con su expulsión del PP. Como diputado votó contra la rebaja del conocimiento del catalán en la administración de requisito a mérito, como pretendía su ex partido.

Su expulsión supuso su paso al grupo de diputados no adscritos en el Parlament y provocó una fuerte crisis en el seno del gobierno municipal. Tres de sus once regidores se mantuvieron en el PP. Se mantiene como alcalde gracias al pacto con AIPC que luego se amplió a ALM.

Con todo, su futuro político podría pasar como peso pesado en el Consell o el Parlament, dada su proyección como diputado.