Varios agentes salen con cajas de documentación del Ajuntament de Calvià. | PAM

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La posible imputación de Carlos Delgado esperará en principio a que la Guardia Civil termine de examinar toda la documentación relativa a los contratos de Radio Calvià. La única posibilidad que puede alterar ese calendario es que las acusaciones, bien la Fiscalía, bien el Grupo Municipal Socialista solicitaran una declaración inmediata. En ese caso, la magistrada que instruye la causa tendría que decidir de nuevo.

La acusación particular ya ha solicitado la declaración de Delgado como imputado. La petición fue postergada, si bien estudia ahora si a la luz del nuevo informe de la Guardia Civil plantea de nuevo esta posibilidad. El conseller está personado ya en la causa como querellado y puede proponer prueba y actuaciones sin que se le haya formalizado su imputación.

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El informe presentado por la Guardia Civil se entiende por el momento como un documento parcial al que le falta el resto de documentación para estar completo. A falta de examinar el resto de contrataciones, el primero -que ni siquiera era uno de los incluidos en la querella inicial- contiene, según la Guardia Civil hasta siete irregularidades en su tramitación.

A algunas de ellas, como descuadres en las fechas se unen otros más de fondo como que la empresa adjudicataria -en ese momento Rumbo Visión- superó el límite de facturación publicitaria que fijaba el concurso. A partir de unos ingresos de 4.000 euros cada dos meses, el Ajuntament de Calvià tenía que revisar el precio del contrato, fijado en 20.000 euros al mes en 2004. La Guardia Civil señala que ni el consistorio revisó este precio ni se tiene constancia por el momento de que la empresa presentara las cuentas tal y como estaba obligada por el contrato.

En los próximos días está previsto que la unidad de Policía Judicial de la Guardia Civil presente más documentación en el juzgado relativa a esos contratos publicitarios.