Hace meses que Son Servera estaba entre el polvo, el ruido y las molestias de tener calles y carreteras cortadas, pero mantenían la ilusión de que era para volver a ver el tren en su municipio. | Assumpta Bassa

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«Nosotros no tenemos tractores pero si autobuses y coches y no descartamos plantarnos a las puertas del Consolat para exigir al Govern que restablezca la normalidad circulatoria en Son Servera. El pueblo está dividido en dos por las obras del tren. Es un auténtico desastre. Estamos muy perjudicados. Lo que pedimos es que las obras se acaben cuanto antes». Este era la advertencia del alcalde de Son Servera, Josep Barrientos, muy indignado ante el anuncio del Govern de la paralización del proyecto de recuperación de la vía ferroviaria.

Y es que Son Servera ha sido uno de los pueblos más afectados por estas obras puesto que la principal vía de conexión que une el pueblo con Cala Millor se ha cortado al tráfico que ahora se tiene que desviar por el polígono industrial, hecho que ha provocado sobre todo los meses de verano un «auténtico caos circulatorio».

Paralización

El Ajuntament empieza a mover los hilos y se ha puesto en pie de guerra. Por ello se van a tomar una serie de medidas. Así el alcalde anunció que se hará un pleno extraordinario para exigir que las obras del tren se reanuden y se pueda restablecer la normalidad. Además se presentará una moción para exigir el cumplimiento del convenio ferroviario.

«Sólo es la primera de una serie de movilizaciones que nos planteamos llevar a cabo». Barrientos mostró su rechazo ante esta paralización y quiso dejar constancia pública del malestar que existe dentro del pueblo. «Este verano ha sido muy problemático. Hemos tenido quejas de los comerciantes, de los repartidores locales, ha sido un trastorno también para el transporte público, los turistas que bajaban al pueblo para ir al mercado se perdían por el polígono».

Por otra parte, Barrientos recordó que en unas semanas se pone en marcha el nuevo curso escolar y que en el polígono está ubicado el Instituto. «Todo apunta a que todo será un caos absoluto. El tren debe ser una realidad. Es una antigua reclamación de la comarca del Llevant». Hay que recordar que durante muchos años miles de personas salían cada año a caminar por las vías para reivindicar y exigir a las administraciones a que el tren volviera a circular por la comarca.

Son Servera ha tenido este año una importante mejora viaria con la apertura de la variante. «La alegría no ha sido completo debido a la paralización de las obras del tren», sentenciaba el alcalde.