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G.MAS/M.NADAL Las investigaciones judiciales en el seno de la dirección insular de Carreteras del Consell de Mallorca a causa de la operación Peaje, que investiga una trama de corrupción durante las obras del desdoblamiento de la carretera Palma-Manacor, ha servido de argumento para que el Bloc de Manacor -PSM+Esquerra+Verds- exija la retirada del Plan Director Sectorial de Carreteras al estar «bajo sospecha».

Así se manifestaba el edil Joan Llodrà, quien mantuvo que «este plan carece de credibilidad por las actuaciones policiales y judiciales contra quienes lo han redactado».

Manacor
Los regidores Sebastià Gaià, Joan Llodrà y Andreu Pascual presentaron las alegaciones que afectan a dos proyectos de ronda de circunvalación en Manacor y Porto Cristo, aunque han mostrado su apoyo a la ronda de Porto Cristo dirección Cala Anguila y la mejora de la carretera de Manacor hasta Calas de Mallorca, pasando por Son Fortesa.

Así se oponen a una ronda en Porto Cristo dirección al núcleo costero de s'Illot, dos vías de circunvalación por el sur y el oeste de Manacor, al considerarlo una excusa para continuar con el crecimiento urbanístico, y la autopista Manacor-Sant Llorenç.

Además, consideran que la reforma de la carretera dirección a Son Carrió se tiene que realizar «con respeto ya que tiene que ser mejorada pero sin cambiarla en exceso ya que la usan muchos ciclistas».

Inca
Después de analizar el trazado de la futura ronde norte de Inca, los grupos municipales del PP, PSOE y Bloc acordaron pedir al Consell de Mallorca que se modifique el tramo final de la ronda.

Desde el Ajuntament se dan dos opciones posibles. La primera es hacer pasar la vía pegada al polideportivo Mateu Canyellas para poder utilizar el vial de servicio y terminar la ronda detrás de las casas Cela o de Can López. En esta opción se deberían construir dos rotondas al final de la ronda para unir la vía con un cruce de caminos y otra rotonda posterior para unir la ronda con la antigua carretera de Alcúdia.

La segunda opción, aparta la nueva vía lejos del casco urbano de Inca aunque también pasa por detrás del polideportivo de las casas Cela. Esta alternativa supone un gran consumo de territorio ya que se deberían expropiar unas 12 fincas.

Aunque desde el Ajuntament se defiende la primera opción, se presentarán las dos alternativas al Consell para que sea el órgano insular quien decida el trazado final de la nueva ronda norte.

El Ajuntament de Inca discutirá estas dos opciones durante la comisión de urbanismo del próximo lunes para poder remitir los documentos necesarios al Consell y presentar las alegaciones oportunas al Plan de Carreteras para que se cambie el trazado del último tramo de la ronda norte. Actualmente, la futura ronda pasa por delante del nuevo colegio público de Son Amonda.