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Las arcas municipales de los ayuntamientos más pequeños de la Isla se liberarán este año de una carga que limitaba aún más sus posibilidades inversoras. Por primera vez en la historia de la Comunitat, el Govern sufragará los gastos municipales que ocasionan a las corporaciones locales de poblaciones con menos de 5.000 habitantes los sueldos de alcaldes o regidores con dedicación exclusiva, si es que los tienen porque en muchos casos les es imposible crear esta partida.

De los 30 municipios de Mallorca que podían acogerse a esta medida, 26 han solicitado esta retribución que el Ejecutivo comenzará a resolver en breve. Los ayuntamientos han cursado esta petición tras la aprobación el pasado mes de mayo del decreto regulador del sistema de compensación económica destinado a los ayuntamientos que desarrolla la Ley Municipal y de Regimen Local de las Islas. Esta ley, que data de 2006, preveía esta retribución «con la intención de dignificar la vida pública municipal, reconocer la insustituible labor desarrollada por los cargos públicos locales y colaborar en una más factible dedicación al servicio de la gestión públcia local».

Para satisfacción de los alcaldes, percibirán un sueldo de 2.703, 83 euros mensuales brutos y tendrán 14 pagas. El decreto establece tres requisitos básicos que se han de cumplir obligatoriamente: que la población del municipio o entidad local menor sea inferior a los 5.000 habitantes, que el capítulo de ingresos ordinarios de los presupuestos municipales no supere los 3 millones de euros y que la cifra global de retribuciones, indemnizaciones y asistencias que la entidad prevé abonar al resto de miembros electos no supere el importe de la solicitud.

Estas condiciones se dan en Ariany, Banyalbufar, Búger, Campanet, Consell, Deià, Escorca, Esporles, Estellencs Fornalutx, Lloret, Llubí, Mancor, Maria, Montuïri, Palmanyola, Petra, Porreres, Puigpunyent, Sant Joan, Santa Joan, Santa Eugènia, Selva, Sencelles, Sineu y Vilafranca. Y no contarán con la retribución Alaró, Costitx, ses Salines y Valldemossa al no solicitarla. Los dos primeros no tienen mayorías, ses Salines tiene un presupuesto mayor y Valldemossa ha estimado no acogerse. El decreto fue promovido por José Maria Rodríguez, ex conseller d'Interior, pero no será él quien lo gestione. Tras los cambios, Miquel Nadal, director general de Administraciones Públiques, se encargará de que las retribuciones se hagan efectivas este año. «Con este sueldo se da la categoría que merecen los alcaldes. Es un reconocimiento a su trabajo porque todos tienen problemas financieros. De todas formas, se puede mejorar. En Valldemossa, por ejemplo, no tendrán exclusividad, pero lo cierto es que dedican tiempo al Ajuntament. Se pueden estudiar alguna medida».