Unió Mallorquina (UM) se manifestó ayer con contundencia en contra
de la actuación de Joan Thomàs durante la festividad del Carnaval,
en que se disfrazó de monja y protagonizó un striptease.
Bartomeu Vicens (UM). «Una imagen vale más que mil palabras y
esto es un ejemplo», afirmó Bartomeu Vicens, secretario de
comunicación y coordinador de la Part Forana de UM. «Y no nos
olvidemos de Delgado, que le rio las gracias a Thomàs y le sacó
fotos. Si en verano los dos protagonizaron un espectáculo
antidemocrático y de transfuguismo, ahora hacen otro espectáculo de
gran ordinariez y de mal gusto», subrayó Vicens.
«Este espectáculo supone una bofetada a la actividad política;
produce daño a la clase política que trabaja por el bien de la
comunidad», aseguró el dirigente de Unió Mallorquina, quien
apostilló que «es un espectáculo típico de la derechona de toda la
vida. El PP a nivel nacional se llena la boca propagando valores
democráticos, éticos, de ayuda a las confesiones religiosas y luego
son capaces de hacer este tipo de espectáculos».
«Ahora», concluyó Bartomeu Vicens, «es un buen momento para que
el PP marque distancias con el tránsfuga Joan Tomás».
Cosme Bonet (PSOE). El PSOE, por su parte, se mostró más cauto.
Cosme Bonet, secretario general de organización de la Federación
Socialista de Mallorca, aseguró que «cada cual debe saber dónde
están los límites. Allá él con su conciencia», dijo y añadió:
«Desde luego, esta actuación no ayuda a mejorar su imagen
pública».
Religiosos y cofrades. La representación del concejal tránsfuga
Joan Thomàs en la fiesta de Carnaval, disfrazándose de monja y
protogonizando un striptease, produjo ayer reacciones contrarias
entre los colectivos de religiosas y de cofrades de la Isla.
Thomàs se declaró católico practicante y, además, es miembro
fundador de la cofradía del Sant Crist del Calvari. Juan Antonio
Darder Colom, representante de la asociación de cofradías de Semana
Santa en el consejo parroquial de Sóller, actuando como portavoz de
la junta de cofradías, puso de manifiesto «nuestro absoluto rechazo
a la deplorable actuación en el desfile de carnaval por parte del
concejal de Calvià, Joan Thomàs, el cual apareció vestido de monja
y realizó un striptease y para mayor escarnio dice ser fundador de
una cofradía de Semana Santa». «La actitud de Joan Thomàs
constituye una burla a los creyentes, a las monjas y al colectivo
de cofradías de Semana Santa ya que su actitud atenta contra el
buen nombre de las mismas, por lo que expresamos nuestra más
enérgica repulsa, así como pedimos su dimisión de cualquier cargo
que pudiera ostentar dentro del mundo cofrade».
Xabier Viver, presidente de la cofradía del Sant Crist de
Alcúdia, también afirmó que «no me parece corrector despreciar y
jugar con unos sentimientos».
La religiosa Margalida Moyà, directora del colegio Arcangel San
Rafael, aseguró a este diario que «hay que ser respetuosos con los
símbolos religiosos, sean de la religión que sea». «Es una cuestión
extremadamente delicada», agregó.
Xavier Bonet, director de COPE-Mallorca, emisora de la
Conferencia Episcopal, también se hizo eco de la polémica en torno
a la actuación de Joan Thomàs. En su editorial, Bonet calificó como
«deplorable», «de mal gusto» y «penosa» la actuación del concejal
Thomàs teniendo en cuenta, además, «su condición de representante
municipal».
«El carnaval se entiende como sátira y humor y se aceptan
elementos religiosos, pero de esto a lo protagonizado por Joan
Thomàs hay un abismo. Puede haber religiosas que se sientan
molestas e insultadas». «En estos momentos en el que se habla de
extremar el respeto a las religiones, resulta que para los
cristianos todo vale y se utilizan sotanas y hábitos para ofender y
ridiculizar a este colectivo», dijo Bonet en la COPE.
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