El alcalde de ses Salines, en las fiestas celebradas la pasada semana.

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El alcalde de ses Salines, Sebastià Vidal, se quedará sin licencia de obra municipal para su club hípico. La suspensión de la concesión del interés general por parte del Consell de Mallorca impide al organismo municipal conceder esta licencia, imprescindible para poder ejecutar las obras. La suspensión cautelar acordada por el Consell entró ayer en vigor una vez publicada en el Butlletí de les Illes Balears.

La vivienda y las cuadras propiedad del alcalde se encuentran en suelo rústico, en una parcela de menos de 9.000 metros cuadrados. Para poder ejecutar cualquier tipo de obra en la zona es imprescindible que el Consell de Mallorca conceda el interés general. Dado que esta declaración ha quedado en suspenso, no se podrá realizar ningún tipo de obra.

Se trata de una suspensión preventiva a la espera de que el Consell analice con detenimiento todo el expediente para resolver si se revoca a o se mantiene la declaración de interés general. No se volverá a pedir informe al Govern balear, a pesar de que el informe favorable que emitió en su día fue inusitadamente rápido y claro.

A pesar de que no se ha pedido un nuevo informe, el Consell de Mallorca se ha dirigido a la Conselleria de Presidència para que le envíe documentación referida a la fecha exacta en la que se constituyó la asociación. El Consell quiere saber si es cierto que la asociación se constituyó con posterioridad a la fecha que avalaron hasta once alcaldes de otros municipios del PP.

Ahora se está a la espera de que la Conselleria que dirige Rosa Puig envíe las certificaciones para determinar si el interés general concedido en su día se revoca o se mantiene. En caso de que se revoque, el alcalde habrá incurrido en una ilegalidad urbanística que acabará con toda probabilidad con la demolición de la obra hecha ilegalmente.