A los doscientos ciclistas que partieron de Sineu se les fueron sumando a lo largo del recorrido otros tantos manifestantes. Foto: E.B.

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Cerca de seiscientas personas según los manifestantes, doscientas según la Guardia Civil, participaron ayer en la bicicletada contra la autovía Inca-Manacor. Unos doscientos manifestantes, miembros de las plataformas Autovía No, Sí al Desdoblament y No al segundo cinturón se concentraron a las once de la mañana en la Plaça des Fossar de Sineu desde donde partieron en bicicleta rumbo a Costitx pasadas las 11.30 horas. Por el camino se fueron sumando un centenar más de bicicletas y tras los cinco kilómetros de recorrido, que completaron en poco más de media hora, les esperaban ya en Costitx otros tantos manifestantes.

Allí recorrieron, bien a pie o en bicicleta las principales calles de este núcleo urbano hasta las puertas de la casa de su alcaldesa y presidenta del Consell, Maria Antònia Munar, donde hubo un pequeño enfrentamiento verbal con algunos familiares de la presidenta. Pocos minutos después al grito de «Volem un altra multa», los manifestantes partieron rumbo a la plaza nueva de Costitx donde portavoces de las distintas plataformas leyeron un manifiesto con el que quisieron lanzar un mensaje de esperanza «para que no cesen las movilizaciones» al tiempo que pidieron a las personas que aún no han participado en las mismas se sumen a las distintas manifestaciones y otros actos convocados, explicó Miquel Gelabert.

Aunque mucho menos multitudinaria que la gran manifestación protagonizada el pasado mes también en la plaza des Fossar de Sineu, la de ayer también se hizo oír. Algunos manifestantes procedentes de Manacor se desplazaron hasta Sineu en tren para unirse a la marcha en este punto mientras que desde Sencelles partieron otras tantas bicicletas directamente hacia Costitx.