TW
0

«¿Qué hacemos, salimos o no?» era una de las preguntas que se hacían los más de 150 vecinos de sa Coma que se habían reunido poco antes de las 10 horas de la mañana para emprender la V Pujada al Castell de sa Punta de N'Amer a pie. La situación empezaba a ser inquietante porque desde las siete de la mañana hasta las diez no dejaba de llover. Pasados unos cinco minutos de las 10 horas se produjo el milagro: cesó la lluvia y los rayos del sol se asomaron vaticinando una gran mejoría. Fue entonces cuando se oyó: «¡salimos!».

Los xeremiers se pusieron al frente para acompañar al colectivo mientras sonaba la música tan característica que ofrece esta especie de gaita mallorquina. La Pujada al Castell de sa Punta de N'Amer se ha consolidado en su quinta edición gracias a la iniciativa de la asociación de vecinos de sa Coma que cada año organiza unas fiestas más populares y participativas en honor a su patrona, Santa Maria.

Esta actividad tiene un doble objetivo: ofrecer una jornada lúdica con juegos populares y disfrutar de un espacio protegido por su gran valor medioambiental, ya que es el pulmón de la zona costera de Sant Llorenç. Sa Coma empezó siendo una urbanización y ahora es un pequeño pueblo.