La depuradora de Pollença será mejorada y ampliada gracias a la
firma de un convenio entre el Ajuntament y el Govern de les Illes
que, además, permitirá reutilizar el sobrante de agua en el riego
del campo de Golf de Can Guilló y de las zonas verdes públicas. Las
obras, que tienen un plazo de ejecución de 18 meses, saldrán a
concurso una vez se tramite la licencia de obra y estarán
terminadas previsiblemente en el año 2005, según explicó la
Consellera de Medi Ambient, Margalida Rosselló.
El presupuesto de esta intervención, financiada en un 80 por
ciento con fondos europeos, es de 5.524.934 euros y la depuradora
será capaz de asumir un caudal de 8.000 metros cúbicos. Será además
la segunda depuradora de Mallorca que incorporará una pequeña
planta de biogás que permitirá el autoabastecimiento energético
aprovechando la combustión de los lodos tratados. El Ajuntament de
Pollença se compromete, por su parte, a ir separando las redes de
aguas pluviales y fecales del municipio para reducir así el exceso
de caudal que llega hasta la depuradora en días de fuertes
lluvias.
Tanto la alcaldesa de Pollença, Francisca Ramón, como la
consellera de Medi Ambient, Margalida Roselló, destacaron:
«Teníamos claro que había que ampliar y mejorar la depuradora de
Pollença que actualmente no es capaz de asumir todo el caudal que
le llega, especialmente en los meses de verano, pero era necesario
disponer de unos terrenos para ejecutar la obra». Finalmente, la
ampliación de la depuradora será posible tras el inicio de las
obras de construcción del polígono industrial del municipio a
finales del año 2002. Y es que para la ampliación de las
instalaciones se utilizarán dos solares de 3.300 metros cuadrados
que el Ajuntament recibe como compensación de esta zona
industrial.
El concejal de Medio Ambiente de Pollença, Gabriel Cerdà,
explicó que «el Ajuntament ya está trabajando en la separación de
las aguas fecales y pluviales en el Moll, donde hemos encontrado
muchas sorpresas, pero no se puede parar y aún faltan actuaciones
más concretas en Pollença». El gerente del Ibasan, Joan Horrach,
indicó que aunque las obras se prolongarán dos años «la situación
en la que se encuentra ahora la depuradora de Pollença no tiene
nada que ver con la que presentaba en 1999, porque desde entonces
se han realizado grandes inversiones para la mejora de las
instalaciones».
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