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El presidente de Majórica y del consorcio empresarial La Seda, Rafael Español, valoró ayer de forma positiva la actitud del principal acreedor de la entidad, el Santander Central Hispano (SCH) a la hora de tomar una decisión sobre la operación de compraventa de la empresa perlera manacorí, «sin la predisposición de la entidad de rebajar la importante deuda crediticia que contrajeron los anteriores accionistas no se podría haber llegado a un acuerdo», señalaba ayer en Palma ante la presencia del vicepresidente del Govern y conseller d'Economia, Pere Sampol, junto al cuadro directivo de la entidad.

Esta actitud del banco es la que hará posible que los nuevos propietarios de Majórica levanten la suspensión de pagos presentada en el pasado mes de marzo a finales de año o principios de 2003 y que en el próximo ejercicio «se equilibre el balance y se puedan generar beneficios».

Majórica fue adquirida el pasado 9 de agosto por unos 28 millones de euros por la sociedad Line Invest XXI y su director general, Alfredo Coco, será el encargado de elaborar el plan estratégico y una auditoría laboral, que estarán ultimadas a final de año. El plazo de amortización de la deuda fue fijado por el presidente de Majórica en cinco años, durante los cuales «se generarán beneficios en la empresa y habrá aporte de capital anual hasta pagar toda la deuda, de ahí que lo estipulemos en cinco años».

Los nuevos propietarios tienen previsto perder este año unos 4 millones de euros, pero a partir de 2003, «se logrará equilibrar el balance, generar beneficios y tener ejercicios contables saneados».

Español recalcó que los nuevos propietarios «están muy ilusionados con la compra, pero tenemos la cabeza clara: hay problemas, y hemos de afrontarlo. Mientras que en 1998 Majorica tenía unas ventas de 42 millones de euros, este año alcanzaremos con suerte los 24 millones».

Aunque no quiso adelantar el contenido del plan de viabilidad que permitirá reflotar la compañía, señaló que los nuevos propietarios tienen como objetivo potenciar la red comercial tanto en el mercado nacional como internacional, mejorar los procesos productivos encaminados a reducir los plazos de entrega, adecuar la plantilla a las necesidades de la empresa y renovar y reorientar la actividad de la tienda de Manacor.