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LUIS PLANAS El Partido Popular de Sineu considera que el equipo de gobierno del Ajuntament (Sineuers Independents- Grupo Mixto) está favoreciendo una operación urbanística en la venta de la antigua fábrica de confituras Rausa. El Ajuntament aprobó en el último pleno municipal solicitar al Consell de Mallorca una declaración de interés general para que la antigua fábrica abandonada desde hace 20 años se pueda convertir en un espacio de arte visual, tal y como pretende un empresario catalán.

Los populares, que se abstuvieron en la votación, sospechan del precio real de la venta fijada ahora por el propietario de la fábrica en unos 750 mil euros. «Cuando el equipo de gobierno anterior (PP-UM) hizo gestiones de venta hace ya un par de años el precio solicitado era de tan solo unos 270.000 y no entendemos esta subida importante», explica el portavoz del PP, Josep Oliver. Oliver recuerda que la fábrica, ubicada en suelo rústico, iba a convertirse entonces en naves de transformación agrícola «tal y como recomendaban los informes de los técnicos municipales».

El PP denuncia, además, el «oscurantismo» del alcalde Andreu Matas a la hora de explicar al pleno la solicitud de un interés general para crear en la vieja fábrica «un espacio de arte visual en el que también se podrían construir un bar y una pequeña tienda».