La Conselleria de Medi Ambient presentó ayer el proyecto de
remodelación y ampliación de la estación depuradora de Sóller, un
proyecto necesario debido al aumento de población de la localidad.
Además, con esta obra la planta se adaptará al Plan Hidrológico de
Balears. Margalida Rosselló, consellera de Medi Ambient, y el
director general de Recursos Hídrics, Antoni Rodríguez, se
desplazaron ayer a Sóller para explicar las intervenciones de
mejora de la depuración de las aguas residuales.
En total, se prevé una inversión de 3.600.000 euros. Se dotará a
la estación depuradora con un sistema de reducción de nutrientes y
con un tratamiento paralelo fisicoquímico de emergencia adecuado
para plantas con una población de más de 15.000 habitantes, aunque
Sóller tiene 11.000. La calidad del agua depurada, según la
Conselleria, se adaptará a las exigencias y a las necesidades de la
comunidad de regantes de la zona. Antes de esta ampliación, la
Conselleria de Medi Ambient llevará a cabo una actuación inmediata
para eliminar los olores procedentes de la depuradoras. La
desodorización de la estación costará 270.000 euros.
Además, se construirá un nuevo colector de aguas residuales que
tendrá un presupuesto de 150'000 euros. El objetivo de este
proyecto es reducir el impacto negativo de los vertidos al
torrente. Con las obras se eliminarán los actuales puntos de
vertido de las aguas depuradas, construyendo un nuevo colector
paralelo hasta la depuradora y un pequeño depósito que eliminará el
caudal de las aguas pluviales hasta el torrente. Por otro lado,
Rosselló, que no mostró mucho interés por el tema de los amarres en
el Port, indicó que esta misma semana se instalarán los pantalanes
flotantes. Aseguró que el retraso se debía a causas
administrativas.
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