La situación de crispación vivida entre los trabajadores de
Majórica el pasado miércoles y jueves y que se saldó con fuertes
movilizaciones, así como la retención de tres directivos y el
asalto a los Juzgados de Manacor, dio paso ayer a una calma total.
El segundo día de huelga general en los tres centros de trabajo fue
notoria ayer en la fábrica del polígono y en la sede de la
industria perlera. La actividad manufacturera quedó paralizada y
las visitas turísticas interrumpidas.
Jornada de reflexión. Así es como los tres comités de los
centros de trabajo calificaron el segundo día de huelga. «Hoy ha
sido un día de reflexión, tanto para los trabajadores como por la
empresa. Una jornada de desconexión muy necesaria para liberar las
tensiones acumuladas», explicó Guillem Vives, portavoz de los
comités de joyas, perlas y tiendas.
Vives también recordó que estas horas de reflexión van dirigidas
a los directivos para que «reaccionen y la próxima semana entreguen
el nuevo plan de viabilidad. Es evidente que no pueden estar de
brazos cruzados ante la presión popular de los días pasados».
Ayer tuvo lugar una reunión entre los miembros de los tres
comités para valorar el resultado de las manifestaciones, que según
ellos han sido muy «positivas, con un seguimiento del cien por
cien».
Para el lunes, aunque la actividad comercial e industrial
volverá a la normalidad, se convocarán diferentes asambleas para
decidir acciones futuras. La empresa anunció que presentará el plan
de viabilidad durante las dos primeras semanas de julio, «cuando
los ánimos de los trabajadores no estén tan alterados».
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