La nueva normativa urbanística redactada por el equipo de gobierno
del PSM elimina el proyecto de construir dos rotondas en las
entradas al pueblo por la carretera Palma-Inca.
La anterior planificación, del año 84, preveía esta solución ara
poner remedio a los problemas de seguridad que ahora se ponen de
manifiesto tanto en el cruce con el velódromo y la calle Josep Capó
como en la intersección con el camino de Coanegra y el nuevo vial
de ronda.
El grupo ALES se queja de este cambio y aprovechará las
alegaciones que presentará para pedir al Ajuntament que mantenga
las rotondas. ALES también planeará la necesidad de habilitar algún
tipo de acceso directo que comunique el polígono de Son Llaüt con
la autopista. El portavoz de ALES, Joan Vich, reivindica la
necesidad de dotar de más zonas verdes al pueblo y echa en cara al
PSM que lejos de esto, el cambio de la normativa recorta más de
4.300 metros públicos.
En lo referente a la edificabilidad, Vich plantea que en las
calles estrechas no se permita más que planta baja y un piso.
Además, Vich dice que en las calles de nueva creación deberían
preverse unas aceras amplias, un carril para bicis y otro para
aparcamiento de los vehículos.
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