«Sólo queremos y pedimos que Antich nos escuche, nada más, los
propietarios de las fincas somos los que no hemos vendido terrenos
ni construido». De esta manera, el componente de la asociación
s'Alou, contraria a la creación de parques naturales en fincas
privadas, Xerefí Guiscafré, reclamó al presidente del Ejecutivo
autonómico que «nos haga caso de una vez por todas, no somos el
enemigo». No obstante, Guiscafré, en declaraciones a este periódico
admitió que «hoy (por ayer) hemos hablado con Margalida Rosselló y
ha mostrado talante de diálogo».
Más contundente fue el portavoz de la misma plataforma, José de
Luna, al manifestar en su parlamento que «estamos tristes y con la
cabeza baja. Somos la diana de esta especie de Govern que nos
gobierna a su antojo, cuando nosotros somos los mejores ecologistas
que hay en Mallorca. Sentimos nuestras tierras con el corazón». De
Luna fue más allá al afirmar que «el alcalde de Artà (Montserrat
Santandreu) es un pedazo de analfabeto que no creo que pueda
conseguir nada público a base de la propiedad privada». El portavoz
de s'Alou afirmó que la presidenta del CIM, Maria Antònia Munar, ha
defraudado a su asociación porque «nos ha abandonado en vez de
aprovechar esta oportunidad».
La fiesta, organizada para celebrar la entrega al Ejecutivo
autonómico de 3.700 firmas en contra del proyecto de la Conselleria
de Medi Ambient, fue secundada por más de 2.000 personas entre
propietarios y simpatizantes provenientes de todos los puntos de
Mallorca e integrantes de las asociaciones Defensa del Llevant,
Defensa de Tramuntana y Propietaris de Finques Rústiques. La velada
fue amenizada por grupos musicales y los asistentes pudieron
degustar ternera asada, panceta, sobrasada y longaniza de forma
gratuita con bebida y postre incluido.
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