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J. M. SASTRE Los jóvenes de ses Salines nacidos en el año 1982, los quintos, creen que hay muchos saliners que se merecen una medalla de plata al mérito al trabajo, como la que concedió el Gobierno Central al secretario del Ajuntament, Joan Burguera. Los qintos, para hacerlo saber, inscribieron «Tots tenim dret a medalla» ante la casa del alto funcionario.

De esta manera, los jóvenes saliners, para no perder las viejas costumbres, tenían que hacer alguna gamberrada y decidieron hacer un repaso a la actualidad local mediante distintas pintadas en las calles del pueblo.

La inscripción «Bufes» ante el futuro centro cultural del municipio o «Això fa por» ante el Ajuntament son otras de las frases. Los quintos en ningún momento quisieron quedar en el anonimato y en varios lugares del pueblo dejaron su particular firma: «Quintos 1982-02».

El alcalde de ses Salines, Antoni Caldentey, aceptó las pintadas con resignación y afirmo que «ahora serán borradas». En referencia a las pintadas ante la casa del secretario, afirmó: «Es una gamberrada más sin importancia, este año se han portado bien porque no han roto nada».