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M. COMÍN Después de la declaración de la Serra de Tramuntana como Bien de Interés Cultural (BIC), paisaje pintoresco, Escorca se ha convertido en uno de los municipios pioneros en llevar a cabo la aprobación inicial del Plan Especial de Protección. Este plan tiene como principal objetivo proteger y fomentar el patrimonio histórico de la zona. Así, en él se recogen y catalogan diversos elementos del municipio que abarcan desde el paisaje, la flora y la fauna hasta la arquitectura del término, diversos elementos de ingeniería y valores etnológicos. Entre los elementos que se recogen en el catálogo, destacan las Cases de Neu, las de los carboners y diversas posesiones.

Además de localizar todos los elementos del término dignos de ser protegidos, en dicho catálogo se determina cuál su estado y de qué forma deberían de tratarse en caso de que se quisiera llevar a cabo obras que hicieran peligrar su fisonomía. En este sentido, existe una ficha técnica por cada elemento a proteger en donde se recogen sus características.

«En un término de las dimensiones de Escorca, llevar a cabo las tareas de localización y determinación del estado en que se encuentran todos aquellos elementos dignos de ser incluidos en el Plan Especial de Protección ha supuesto un trabajo enorme, en el que han participado un total de cuatro técnicos», dijo el alcalde de Escorca, Antonio Gómez.

Tras la aprobación inicial del Plan Especial de Protección por parte del Consistorio, éste será remitido a diversos organismos como la Conselleria de Medi Ambient o el Consell Insular de Mallorca (CIM) y será expuesto públicamente en el BOIB para que los afectados puedan presentar alegaciones o sugerencias. Una vez recogida esta información, el Ajuntament procederá a modificar, o no, el plan en base a las alegaciones y luego se precederá a aprobarlo de manera provisional. Finalmente, será el CIM el que apruebe de manera definitiva este Plan Especial de Protección de Escorca.