TW
0

Consternación, rabia e indignación son los sentimientos que han manifestado los habitantes del núcleo costero de Cala Rajada ante los brutales destrozos al Sant Crist de la parroquia, perpetrados durante la noche del sábado. No obstante, han sido los pescadores los que más han lamentado la profanación del santo cristo al sentirse identificados con su imagen, que fue encargada hace ya unos cincuenta años por los abuelos de los actuales miembros del gremio.

De hecho, la imagen en cuestión lleva como nombre el de Sant Crist de los pescadores. «El autor de la brutal acción debería pagar con la pena capital o sino con el destierro, ya que una persona así no merece estar entre gente civilizada», apuntó el pescador Bartomeu Moll, mientras cosía una red de pesca. Este pescador cree que esta «es obra de un gamberro o delincuente, quizá sea de estos que se dedican a robar y molestar a la gente en el municipio de Capdepera».

Otro pescador, José Hernández, opina que «nunca se habían producido tantos desastres en Cala Rajada que es un sitio muy tranquilo. Considero que el autor de estos destrozos debería ser castigado duramente». Por otra parte, el rector de la parroquia, Joan Simonet, cree que «es obra de una persona desquiciada en un momento de crisis. Conocemos varias personas que tienen problemas psicológicos y tal vez podría ser una de ellas».