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J. M. SASTRE El Patronat de l'Escola Municipal de Mallorquí entregó anteanoche su máximo galardón, el «Reconeixement de Mèrits» correspondiente a 1999 que en esta edición ha correspondido a dos entidades de Manacor: el Moviment Escolta y la comunidad de las monjas benedictinas, que «desde su origen se han mantenido fieles a la lengua y a la cultura catalana», explicó Margalida Fons, delegada de Cultura del Ajuntament de Manacor.

La nominación del Moviment Escolta, fundado en 1959 por Miquel Julià, corrió a cargo del president de la Comissió de Cultura i Joventut del Consell de Mallorca, Cecili Buele, quien recordó sus años de infancia en el escoltismo: «Fui partícipe de una educación que luchó para construir un país democrático en unos años difíciles». Luego se otorgó la placa a la comunidad de las monjas benedictinas de Manacor por «su fidelidad en el uso del catalán», según el poeta Bernat Nadal, que procedió a su nominación.