De la decena de pinos centenarios que daban sombra al mirador del
oratorio de Portals Nous, ayer por la tarde sólo uno quedaba en
pie. Un poco más arriba, junto al templo, apenas se mantenían
erguidos un par. Este rincón de la costa de Calvià era
especialmente apreciado por los residentes más veteranos de esta
zona. Testigos presenciales comentaron a este periódico que a
alguna persona mayor se le vieron caer lágrimas de los ojos cuando
ayer por la mañana eran derribados los pinos, uno tras otro. Además
de pena, el sentimiento generalizado de los vecinos era el de
indignación.
Esta tala de pinos forma parte de las obras del proyecto de
estabilización de la ladera del oratorio de Portals Nous, que el
Ministerio de Medio Ambiente adjudicó a principios de verano a la
empresa Stachys SA por un presupuesto de 61'6 millones de pesetas.
El proyecto ha sido redactado para evitar desplomes de roca que
ocasionalmente se producen y que supone un peligro para los
usuarios de la playa del oratorio, situada bajo el acantilado.
La ejecución de las obras, iniciada la pasada semana, se realiza
en dos zonas diferenciadas. Una de ellas está localizada bajo los
apartamentos Panorama, con una altura media de acantilado de 12
metros y una longitud de 70 metros. En el pie del talud se
construirá un muro de hormigón armado de una altura de 2 metros. En
el resto del acantilado, con un desarrollo de 135 metros y una
altura entre 20 y 25 metros, se asegurará con un talud la ladera
con la inclusión de dos marjades de 5 metros de ancho, lo que
implica modificar el mirador de la iglesia. Los muros de hormigón
serán revestidos de piedra para adaptarse a la estética local.
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