TW
0
GAM La XVII Pujada de Marratxí a Lluc a Peu se celebró ayer con gran éxito pese a la amenaza de lluvia. De hecho, en cuanto a número de participantes se superó a anteriores ediciones. Alrededor de 2.200 vecinos de Marratxí se trasladaron a Lluc para participar en todos los actos organizados a lo largo de la mañana. En realidad, el recorrido a pie lo realizaron entre 500 y 600 marxaires y el resto se trasladó hasta el monasterio en autocares. Una vez reunidos en Lluc, los vecinos de Marratxí asistieron a una misa, participaron en el ball de bot y pudieron escuchar un concierto de la Banda de Música de Marratxí.

A las 13 horas, se procedió a preparar las paellas gigantes. Otros años, con dos paelleras para 1.000 comensales era suficiente, pero en esta ocasión fue necesaria otra paellera más para 250 bocas más. Tomeu y Maria como otros años se encargaron de elaborar las paellas, aunque contaron con la ayuda de numerosos asistentes. Como novedad, este año la paella se repartió en escudelles amb orelles.

A Lluc se trasladaron representantes de los partidos políticos locales, salvo Esquerra Unida que no hizo acto de presencia. Todos valoraron positivamente la fiesta celebrada ayer. Durante la subida a Lluc no se produjo ningún incidente, aunque en todo momento hubo una UCI Móvil con un médico a disposición de la gente de Marratxí. A lo largo de la mañana amenazó lluvia, pero no cayó ni una gota.