El cordero ha subido a dos euros el kilo desde el año pasado. | Pep Trias

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La llegada de la Semana Santa significa incienso, cirios y pasos, pero también ‘panades’, ‘robiols’ y ‘crespells’, en Mallorca. Esta Pascua, la Asociación de Foners i Pastissers de Pimem prevé que la producción de estas elaboraciones aumente un 40 por ciento respecto a la del resto del año. Sin embargo, también se espera una subida moderada en el precio de venta al público provocado por el coste de las materias primas para elaborar estos productos dulces y salados, que se ha incrementado entre un 30 y un 50 por ciento, según Pimem.

El gerente de la Asociación, Pep Magraner, advierte que a la subida de productos como el aceite de oliva, las harinas, la carne -sobre todo de cordero-, la manteca, la ‘mussola’ o los guisantes también se suma el coste de la energía para cocinar.

Teniendo en cuenta que en estas fechas es típico hacer ‘panades’, ‘robiols’ y ‘crespells’ caseros, los hornos de la Isla no pueden reflejar en el precio final el incremento directo que cuesta producir, ya que eso podría desincentivar considerablemente la venta. Por ello, en su lugar, la mayoría asumen esa diferencia, limitando el margen de beneficio y la subida de venta al público.

«La carne ha subido entre un 5 y 10 por ciento, en especial el cordero», dice Pep Trias, el propietario del Forn i Pastiseria Trias. «Se ha incrementado hasta 30 céntimos el kilo de carne», añade. Hace un año en su horno se vendía la ‘panada’ de cordero a 4,10 euros, mientras que ahora lo hace a 4,30 euros. La de pollo o cerdo costaba 2,60 euros, y ahora cuesta 2,80 euros. «El aceite, la harina y la manteca ha subido un 5 por ciento, por eso hemos subido un poco el precio», explica.

Pep Trias en su obrador.
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Matias Pomar, de la mítica Pastisseries Pomar, coincide con Trias en cuanto al encarecimiento de las materias primas: «El cordero ha subido dos euros el kilo y el aceite se ha encarecido mucho, ya está a nueve euros el litro cuando antes valía seis euros», dice Pomar.

Tanto Matias como su padre, Francisco Pomar, han decidido trasladar a la venta la subida de lo que cuesta producir las elaboraciones: «El año pasado las ‘panades’ costaban 3,70 euros, mientras que ahora las vendemos a cuatro euros». «En general, hemos subido todo entre 30 y 60 céntimos, dependiendo de la carne que lleve, el tipo de masa y el tamaño del producto que elaboramos».

Francisco Pomar, en la imagen, y su hijo Matias Pomar están al frente de un negocio referente en el sector.

El dulce, a parte

Mientras las ‘panades’ experimentan un pequeño incremento en el precio final, los ‘robiols’ y ‘crespells’ se mantiene igual que el año pasado. «El precio de los dulces no lo hemos tocado», asegura Pomar. Y es que, ambos postres se elaboran con harina, azúcar y huevos, que excepto la primera, mantienen precios estables desde 2023.

El chocolate por su parte sí ha sufrido un aumento del 10 por ciento, por lo que algunas panaderías han decidido no hacer ‘monas’, ya que hay mucha competencia con las grandes superficies que las elaboran en masa y tienen más oferta.