La ampliación de las zonas de ORA en Palma está pendiente de su inclusión en el nuevo PMUS. | Jaume Morey

TW
5

La gestión de las tarjetas de la ORA y de Acire se podrá tramitar de forma telemática a partir de finales de este año. Esa es la intención del gerente de la Societat Municipal d’Aparcaments i Projectes (SMAP), Pedro Manera, que ya ha comenzado a trabajar con el Institut Municipal d’Innovació (IMI) para que se ponga en marcha el software necesario para este proceso. «Queremos que todos estos trámites se puedan realizar en forma telemática y que, además, suponga la eliminación de los distintivos que se actualmente colocan en los parabrisas de los vehículos, pues tanto la Policía Local como el departamento de Mobilitat del Ajuntament tendrán registradas todas las matrículas que tienen derecho tanto a la ORA como al Acire, declaró Manera.

Antes de esta innovación, la SMAP tiene también intención de que la ORA se pueda pagar mediante tarjeta bancaria, algo que ya es posible en otras muchas ciudades españolas.
Para ello será necesario renovar las máquinas que expiden los tickets de la ORA y en este sentido la buena noticia es que la subvención europea reclamada por el Consistorio está cada vez más cerca y probablemente en febrero se confirme.

La Societat Municipal d’Aparcaments i Projectes tiene también pendiente la ampliación de la zona de aparcamiento tarifado a más barrios de la ciudad. Como se recordará el Ajuntament decidió el año pasado vincular esta ampliación al nuevo Pla de Mobilitat Urbana Sostenible (PMUS), que se está redactando. Una vez que el PMUS esté aprobado y recoja esta ampliación, que es lo previsible, el departamento de Mobilitat deberá realizar el decreto que definirá las zonas afectadas por la ampliación de la ORA. Desde la SMAP se apuesta por ampliar este aparcamiento tarifado prácticamente hasta la Vía de Cintura, pero el gerente insiste en que la decisión final la tiene Mobilitat. Eso sí, Manera confirma que la ampliación incluirá tanto nuevos ejes de residentes como ejes 0/0, zonas estas últimas en las que tienen que pagar también los residentes.