Imagen enviada por una vecina de Palma que muestra solo una parte de las cucarachas que recogió hace unos días de su terraza, poco después de que los técnicos municipales actuaran.

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La presencia de cucarachas en Palma este verano es mayor de lo normal y ha provocado numerosas denuncias ciudadanas. De hecho, en lo que va de año, de enero a agosto, el 010 ya ha acumulado más llamadas ciudadanas por este motivo, hasta 1.222, que en todo 2019, cuando en doce meses se registraron 1.063.

El Consistorio palmesano argumenta, no obstante, que desde un punto de vista climatológico, 2020 está siendo un año especialmente propicio para el desarrollo de las cucarachas. La temperatura inusualmente alta (en orden de 2º C por encima de la del año pasado), especialmente durante primer semestre, y una precipitación acumulada mayor de lo registrado en años anteriores ha favorecido su desarrollo pudiendo adelantar su actividad y crecer en poblaciones más elevadas.

Al margen de los motivos, lo cierto es que son muchos los ciudadanos que este verano están recurriendo a un servicio de desinsectación privado, que cuesta varios cientos de euros, al ver sus hogares invadidos por las cucarachas. Una vecina, que prefiere mantenerse en el anonimato, explica que recientemente denunció la plaga de estos insector en su casa y los técnicos municipales admitieron que cuando realizan un tratamiento en una alcantarilla mueren las cucarachas que están más arriba, pero otras muchas acaban saliendo de forma descontrolada y es cuando se meten en viviendas o locales comerciales. «Al menos podían avisarnos cuando se va a a hacer un tratamiento para que podamos cerrar puertas y ventanas y evitar que entren», pide esta ciudadana.

El servicio de desinsectación y desratización de Palma, informa Cort, realiza tres tratamientos completos en todos los pozos de alcantarillado de los 88 barrios del municipio, así como en los parques, solares y centros municipales.

Entre el 1 de enero y el 31 de julio se ha actuado de forma preventiva en 159 barrios, desinsectando 105.471 alcantarillas y desratizando 33.040. Además, se destacó desde el Consistorio, en las barriadas en las que se observó un mayor más nivel poblacional de cucarachas «se aumentó la frecuencia de desinsectación durante el periodo marzo-septiembre realizando aplicaciones bimestrales en todas las alcantarillas».

Además, de cara al año 2021, se está estudiando la posibilidad de emplear como producto biocida la pintura Inesfly en las zonas en las que se ha detectado una mayor incidencia. En comparación con los insecticidas tradicionales, Inesfly es más costosa en su aplicación inicial pero sus efectos son más duraderos.