La nueva ordenanza no se fijará en el número de animales que se tenga, sino en su cuidado. | ARCHIVO

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El Ajuntament estudia poner en marcha el análisis de los excrementos caninos para multar así a los dueños incívicos que no los recogen. Esta es una de las novedades que podría incluir la nueva Ordenanza Municipal de Bienestar Animal, según informa el concejal de Medi Ambient i Benestar Animal, Ramon Perpinyà.

El regidor admite que legalmente no supone ningún problema, «de hecho ya son varios los municipios españoles que han puesto en marcha esta medida», y aunque es costosa, unos 50 euros por cada análisis, «Cort recuperaría el dinero a través de las multas, que son de unos 300 euros», afirma.

Una medida que también incluirá la ordenanza será la obligación de diluir con agua el orín de los perros en la vía pública.

Por otro lado, el edil también adelanta que Cort va a suprimir de la nueva ordenanza el límite máximo de perros, gatos o similares que puede tener un ciudadano en su vivienda.
Explica que la ordenanza en las que se está trabajando se basará en la anterior, que quedó sobre la mesa al final de la pasada legislatura precisamente por la polémica que ocasionó el establecimiento de un número máximo de tres mascotas por vivienda plurifamiliar.

No obstante, el responsable municipal aclara que aunque no se contemplará ninguna limitación a la tenencia de animales en una vivienda plurifamiliar o unifamiliar, «la ordenanza sí facilitará la intervención por parte de inspectores municipales en caso de que haya sospecha de que los animales no estén bien cuidados».

Perpinyà reconoce que actualmente es más difícil entrar en una casa si no existe una denuncia previa, «por eso se quiere endurecer esta situación y garantizar el derecho de un inspector a entrar si hay sospechas».

En cuanto a los plazos de aprobación de la nueva ordenanza, el regidor informa que si se consensúa con los grupos de la oposición «el objetivo es poder llevarla a pleno para su aprobación en el primer semestre de este año».

Declara que «nos hemos reunido ya prácticamente con todos los grupos de defensa de los animales que existen en la ciudad y hemos recogido todas sus propuestas. A partir de aquí hemos elaborado un borrador de nueva ordenanza para tratar de incorporar algunas de estas demandas».

El acogimiento temporal de perros por particulares no es legal y solo se permitirá a asociaciones

La ordenanza contemplará la posibilidad del acogimiento temporal de perros que son encontrados en la vía pública con chip pero no por parte de particulares sino de asociaciones de animales, que deberán cumplir una serie de requisitos (instalaciones, seguro, etc.). Este acogimiento es reclamado con insistencia por algún grupo de defesa de los animales, pero el concejal Ramon Perminyà ya les ha explicado que legalmente «no es posible, como así determina un informe de los servicios jurídicos municipales». Ni la Ley balear de bienestar animal (1994) ni la ley estatal (1992) lo contemplan. Perpinyà trabaja en fomentar la adopción de perros que están en disposición de ser adoptados y en reducir el plazo desde que el animal entra en Son Reus hasta que puede adoptarse.