Imagen de la pequeña casa de madera que se ha instalado en el poblado y que ahora será derribada. | Ultima Hora

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El Ajuntament de Palma ha detectado varios casos de reconstrucción de infraviviendas en Son Banya desde que finalizó la primera fase del proceso de desmantelamiento del poblado.

Por este motivo, el Consistorio contratará a una empresa que se encargará de la demolición de forma inmediata de cualquier edificación que se levante hasta que se inicie la segunda fase de desmantelamiento, cuyo inicio está previsto para finales de año. Este jueves anunció la licitación por 40.000 euros de la demolición de las nuevas construcciones. Las empresas interesadas pueden presentar sus ofertas hasta día 15 de mayo.

En concreto, se informó desde Cort, una de las familias ha comenzado a ampliar su casa aprovechando que la parcela de enfrente quedó vacía tras uno de los derribos. En otro punto del asentamiento se ha levantado una pequeña casa de madera y en otras infraviviendas se están realizando pequeñas ampliaciones, actuaciones que el Consistorio relaciona con el negocio de la droga de Son Banya.

Paralelamente, el área de Benestar i Drets Socials instalará paneles informativos en los espacios que han quedado vacíos después de las demoliciones y otro en la entrada del poblado advirtiendo de la ilegalidad de las nuevas construcciones.

Hay que recordar que una vez concluida la primera fase de las demoliciones se puso en marcha un sistema de control del poblado para vigilar que las construcciones que se han derribado no se vuelvan a reconstruir. Cuando se detecta una nueva reconstrucción, primero se pide a la familia infractora que detenga la nueva edificación, de manera que se pueda evitar gastos innecesarios. En caso de que no sea atendido el ruego se procede a la demolición inmediata, tal como ya se ejecutó el derribo de la tienda reconstruida el pasado 5 de abril.