La ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, en una reciente imagen. | Efe -

TW
1

Las negociaciones entre Gobierno, patronal y sindicatos continuaban a última hora de la tarde del lunes para lograr sacar con acuerdo una prórroga de las condiciones extraordinarias de los ERTE hasta el 31 de enero.

Tras más de ocho horas sentados a la mesa, el Gobierno apura el tiempo para consensuar un decreto que amplíe la vigencia de los ERTE asociados a la pandemia del COVID-19 con el objetivo de aprobarlo mañana en el Consejo de Ministros.

Los ministerios de Trabajo y de Seguridad Social, los sindicatos UGT y CCOO y las patronales CEOE y Cepyme han comenzado a las 11 de la mañana a negociar sobre el documento remitido por el Gobierno este fin de semana, que recogía los consensos logrados hasta ahora.

No obstante, aún quedaban puntos de conflicto, en concreto los relativos a las exoneraciones de cuotas a la Seguridad Social y a los sectores que quedarán dentro de la prórroga.

El principal desacuerdo está en las actividades que quedarían excluidas de los ERTE para sectores especialmente afectados -básicamente las relacionadas con el transporte y el turismo- y que se quedarían sin ningún tipo de exoneración.

El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ya ha avisado esta mañana de que si consideran que «mucha gente se queda fuera» de los ERTE de los sectores especialmente afectados tendrán que «decir que no» al acuerdo.

El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha abogado por el consenso aunque se ha lamentado también de que los ERTE no vayan a poder llegar «a todos los sectores, porque muchos están asociados directamente con actividades perjudicadas por la pandemia, pero creo que no va a ser posible»,

Por su parte, el secretario general de CCOO, Unai Sordo, quien ha considerado esta mañana que habrá acuerdo porque la propuesta del Gobierno es «lo suficientemente ambiciosa» y ha descartado el descuelgue de la patronal, quien «no tendría fácil explicar su rechazo».