El jefe del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, junto al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, durante la reunión mantenida esta tarde en el Palacio de la Moncloa. | J.P.GANDUL

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El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, obvió este lunes en el Congreso dos de los temas más candentes de la actualidad política: el llamado 'caso Soria' y la valoración de la Diada y referéndum anunciado por el presidente catalán, Carles Puigdemont.

Durante la reunión del Grupo Popular ningún diputado del partido tomó la palabra y Rajoy se centró el culpar a Pedro Sánchez del actual bloqueo político que hay en España.

A su llegada a la Cámara Baja poco después de las 12.30 horas, la prensa preguntó al jefe del Ejecutivo si mantiene la confianza en su ministro de Economía, Luis de Guindos, pero se limitó a sonreír y no respondió.

Está previsto que este miércoles el propio Rajoy arrope a su titular de Economía en la Fundación Rafael del Pino con motivo de la presentación de su libro, un acto en el que también sobrevolará la polémica creada por la designación del exministro José Manuel Soria para un puesto directivo en el Banco Mundial.

Diada

En las propias filas del PP sorprendió que Rajoy no aprovechara la reunión del Grupo Popular para hablar sobre Catalunya un día después de la celebración de la Diada, que este año contó con menos respaldo ciudadano que en manifestaciones anteriores y que tenía como principal novedad la presencia del presidente de la Generalitat en una de las marchas.

El jefe del Ejecutivo centró su discurso en recriminar a Pedro Sánchez su posición de bloqueo y en subrayar que el Gobierno estudia fórmulas jurídicas para minimizar el daño causado por esa actitud «obstruccionista».

Durante el encuentro del Grupo Popular ningún diputado tomó la palabra pese a que se anunció un turno de ruegos y preguntas. Aparte de Rajoy, solo habló el portavoz parlamentario, Rafael Hernando, para dar cuenta del organigrama coincidiendo con la constitución de las comisiones esta semana.

La dimisión de Rosa Valdeón como vicepresidenta de Castilla y León tras conocerse que superó la tasa de alcoholemia acaparó el foco mediático tanto a la llegada como la salida de la reunión del Grupo Popular. Sin embargo, más de una decena los diputados del PP evitaron pronunciarse sobre este asunto cuando se les preguntó si debía dejar todos sus cargos.

La exvicepresidenta del Congreso Celia Villalobos sí que habló para asegurar que «hará lo que tenga que hacer». También lo hizo el ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz para asegurar que «la ejemplaridad en Seguridad Vial es especialmente importante».